Han pasado dos años desde el ansiado estreno del episodio VII, “El despertar de la Fuerza” y “de aquellos asteroides, estas tormentas”. Los haters, esa especie peligrosa que espera agazapada tras su butaca esperando el momento para blandir su sable de tristeza, se lanzaron cual moradores de la arena a descuartizar lo que, en primera instancia, supuso un homenaje a la saga y los fans. Hasta hoy. Con el episodio VIII en cartelera roen con rabia huesos de bantha siempre alimentados por el Senado galáctico de gungans que los espolean. #TheLastJedi cabalga por encima de sus reducidos cráneos para, según el que aporrea el teclado, auparse por derecho y Fuerza propia al segundo escalón de la saga tras “El Imperio contraataca”. Aquí, mi #gilicrónica, SIN SPOILERS.
La pregunta que me surge una y otra vez al escuchar los rugidos hambrientos de wampa que emiten sus gargantas y textos es ¿qué esperaban? Sencillo. Al hater (y por qué no decirlo, la sociedad instantánea de hoy día) solo le valen las respuestas. Y no cualquier respuesta sino única y exclusivamente la que sus escrotos tímpanos quieren escuchar. Ninguna otra. Para ellos el misterio debe ser algo efímero, cuestiones que se clarifiquen antes de los títulos de crédito y del siguiente estreno e incluso, para algunos, si se los destripan en las promos o tráilers, mejor, tiempo ahorrado hasta poder soltar sus primeros Rayos de Fuerza contra cualquiera que ose DISFRUTAR. Las preguntas, los misterios pendientes, … todo ello es basura espacial que desechar. ¿Pensar o fantasear en posibles caminos o viajes del héroe alternativos? Trabajo de chatarreros.
El episodio VII fue su aperitivo tras años de espera. Que si era idéntico al IV, que Kylo Ren no le llegaba al casco a Darth Vader, que si “4 Ala-X destruían un planeta entero”, que Luke no abría la boca, etc, etc … y así hasta los anales de sus digestiones mentales de más de 1000 años. Ante su imposibilidad de DISFRUTAR con la vuelta de Han, Leia, Luke, R2 … han tenido dos años (incluyendo el gran regalo de “Rogue One” al que tampoco quisieron dejar fuera de su Borderío Exterior) para alimentar el mynock que llevan dentro. No os equivoquéis, esperaban el episodio VIII no para saciar su sed de conocimiento, no. Solo querían saber las respuestas ofrecidas para poder afianzar su iracunda crítica y, el trabajazo, a mi entender, de Rian Johnson les ha supuesto una nueva vuelta de llave hidráulica y ha servido para detonar térmicamente su mezquindad argumental.
Dejando de lado a ese tipo de gente que es incapaz de DISFRUTAR de algo sin optar a premio en las categorías de “ya lo dije” o “estaba claro”, “The Last Jedi” supone una ruptura, un soplo de aire fresco que, a mi entender, pedía a sablazos la saga Star Wars. Momentos realmente maravillosos y mágicos nos ofrece esta última entrega incluyendo un final que renueva la esperanza que emergía allá por 1977. Una PELÍCULA que no olvida, que rinde homenaje en distintos minutos del metraje al episodio V y que abre ante nosotros una expansión del Universo por el que muy pocos apostaban aún sin saber el final de esta última (?) trilogía. Difícil es escribir más sin destripar. Suficiente entiendo es, padawans.
De aquí a unos días podremos debatir los detalles que gustéis pero, de momento, este texto seguirá libre de spoilers (y ganas de empezar a debatir os aseguro que no me faltan). Los que aún no la hayáis visto liberaos de textos y comentarios Sith y acudid al cine sin tacha y mancha. A DISFRUTAR, una vez más.
Solo me gustaría preguntarle al androide de protocolo como se dice “GRACIAS” en toda lengua conocida y esperar a verla por segunda … y tercera vez.
@disparatedeJavi
Totalmente de acuerdo contigo, es un placer encontrar a alguien que ha puesto por escrito lo que llevo pregonando por toda mi galaxia de amigos. Y estoy seguro que somos un ejército de rebeldes que ha disfrutado con la película. A mi también me ha parecido un peliculón, y nada superficial, sino todo lo contrario.
¡Somos Legión! ¡La Resistencia ! Y como bien dices, no solo hay que quedarse en la superficie sino que hay mucho fondo que rascar.
Un placer Aitor.
Me perdí el verla contigo, pero me alegra que saliesemos con la misma impresión, es buena de coj###, y la clave como has remarcado, es que se disfruta, que al cine se va a eso, si no ahórrate la pasta o empleala en un enema para que te aclare las ideas.
¡Ahí estamos Nachete! Criterio, pijo, criterio! jajajajaja … Lo peor y más cachondo de todo es que son críticas que se podían aplicar perfectamente a cuando se estrenó el Imperio Contraataca! Así nos va, evolucionando …