Muchos de vosotros (sobre todo esos culés que me esperan agazapados) me habéis preguntado por qué no he escrito sobre el Clásico del otro día y de cómo el Barça demostró al Real Madrid, primero, saber a qué juega (guste más o menos) y, segundo, que su rival blanco va dando tumbos desde hace semanas, “Mundialito” mediante. Mi último texto sobre los pupilos de Zidane sigue más que vigente, de ahí mi silencio. Hoy, y para despedir el año y marcharme a mi merecido descanso, os dejo unas líneas sobre lo que ya es tradición en la prensa pelotera: si los resultados no acompañan, inundemos nuestras páginas de posibles fichajes.
¿Y qué nombres se barajan para remodelar la plantilla del Real Madrid? ¿Qué cracks hay al alcance y dimensión del club de Concha Espina? Pocos, muy pocos y cada vez más caros. El primero de ellos, al menos hasta hoy, es Neymar. El viejo sueño del tito Floren y de gran parte del madridismo. Con él se cumplirían las máximas del vikingo de a pie: tener a uno de los mejores del mundo y, a su vez, meterle un poquito más el dedo en la córnea a su eterno enemigo. Pues yo no lo ficharía. Ahí lo dejo a riesgo de lapidación. Razones, muchas. Desde la evidente desestabilización que este jugadorazo lleva de segundo apellido y representante, hasta el salario ridículamente escandaloso que habría que abonarle pasando por los evidentes problemas futbolísticos que traería en las botas: cortar la progresión de Asensio (aunque Zidane parece empecinado en colgarse esa medalla), capar a un fichaje de 45 millones que aún no se sabe si cuajará, relegar al nunca jamás a Lucas Vázquez o afectando indirectamente al recién llegado e infrautilizado Ceballos. Ni qué decir de la venta del símbolo madridista de los últimos años. Demasiado césped removido solo para cumplir la venganza soñada del máximo mandatario blanco. No a Neymar.
Las portadas llevan días (casi semanas) bombardeando con otro nombre: Harry Kane, uno de los pocos “9” de garantías que hay por el mercado. Joven, dinámico, poderoso y con mucho gol. A priori podríamos preguntarnos, ¿hace falta algo más? En sus piernas no, en el Real Madrid, bastante. Los blancos llevan jugando sin un delantero centro puro desde que, si me apuran, se retiró Van Nilsteroy. Han desfilado muy buenos 7, algún que otro falso 9 e incluso algún 10 que ha colmado la paciencia de la grada, pero “9”, lo que se dice un “9”, no. Y alinear de inicio y como baluarte a un jugador de estas características te obligaría a dar un golpe de timón en el estilo de juego de los últimos años. Una petición que, personalmente, firmaría ya, antes del Mundial.
La llegada del inglés sería una muy buena noticia si se macerara con otro fichaje a su altura (de calidad y estilo). Y en mi cabeza sigue retumbando el nombre de Hazard. El extremo belga, ansiado por Zidane (eso si sigue en el banquillo el año que viene) es otro de mis sueños húmedos. Un extremo RÁPIDO, desequilibrante, con gol, con pase y con mucho, mucho talento. Un acompañante perfecto para recuperar las casi ya extintas cabalgadas de Cristiano Ronaldo y los centros desde banda para que el delantero haga su trabajo. Fútbol fácil, sencillo y siempre efectivo. Una baza que dejó de jugar el Real Madrid desde que el cinco veces Balón de Oro perdiese la velocidad. También traería unos efectos secundarios que, a día de hoy, correría el riesgo de asumir: vender al portugués. Ya lo he dicho. Que el resto de la BBC vaya haciendo sus cuentas también. El cambio nunca es recibido pero ese día en que es necesario, llega, siempre llega.
Lo de la portería es otra broma y de muy mal gusto. Todo hace indicar que de aquí a unos días será Kepa quien llegue para fortalecer los palos. Y yo, continuo sangrando con mis preguntas: ¿un portero es lo más necesario hoy día? Y, si se ficha al vasco como futuro, ¿de dónde vienen los insoportables e interminables rumores y noticias sobre Courtois y De Gea? Imagino que en un último intento de periodista hooligan o representante nervioso de ver a uno de ellos en el Real Madrid ya que, con ellos, seguimos dando giros de 360º: ¿para qué? Keylor posiblemente sea de los mejores de la estrepitosa temporada blanca. Es un hecho. Como que en defensa e idea de juego es donde se necesita una dura reflexión acompañada de cambios. Veremos qué depara el futuro inmediato en esa posición.
Pues nada, disparatad@s, podéis pasar un fin de año maravilloso leyendo la prensa deportiva hasta que vuelva la competición. Tendréis regalos de Reyes cada día. Podéis entrar en el juego e ir proponiendo nombres. Me voy pero no estaré ausente. De Isco hablamos a mi vuelta.
¡Feliz año peloteros!
@disparatedeJavi