El pasado martes tuve el gusto de asistir al segundo encuentro gastronómico “Degustando Murcia“, proyecto cultural multidisciplinar “Murcia Inspira” con la colaboración de Cervezas Alhambra. Un buen (y necesario por estos lares) ratico. Aquí. mi #gilicrónica.
Vaya por delante que no puede gustarme más este tipo de iniciativas que no tienen la recaudación y el engorde como único fin. Ver empresas que están dispuestas a involucrarse en eventos culturales, gastronómicos, de aprendizaje, de compartir … sin estar pensando en las cuentas de resultados del evento es de agradecer y mucho. Así que un gigante gracias a estas iniciativas que dan voz a quienes no están en la exclusiva rueda de hámster monetaria.
La sala está de moda desde hace un tiempo, es un hecho. Y por ello, “Degustando Murcia”, reunió en Loft 113 a finalistas del V Concurso Regional de Profesionales de Sala de la región: Ángela Molina, Ruth Rueda y Gabriel Sánchez. Los tres, junto a Daniel Romero, Sommelier de Cervezas Alhambra, nos fueron presentando el maridaje cervecero preparado para el menú ideado por La Alacena de Ángela: Alhambra Especial, Reserva 1925 y Reserva Roja.
Muchos rostros conocidos compartiendo mesa tras los “Raviolis de morcilla de verano y caramelo de cerveza y trufa” que sirvieron para darnos la bienvenida. Con una Especial, el mejor recibimiento. Ya sentados, la cata comenzó con “Las Jalepas”, que en panocho significa dosis pequeña, miajica. “Taco de bonito con tomate y crema de encurtidos“, “Tosta de sardina con cebolla caramelizada en cerveza y jenjibre” y “Paparinera” fueron los tres snacks maridados con Alhambra Especial. De los tres me quedo sin duda con el segundo, a un nivel bastante superior que el de sus acompañantes. En líneas generales, un aperitivo muy bien elegido.
Continuamos con “La Encañizá” y Alhambra Reserva 1925 degustando un “Salmorejo de ensalada murciana” (y teja de aceituna de cuquillo) y “Caldero con trigo y ali-oli de espirulina“. El primero ofrecía el resultado evocador esperado mientras que el segundo sorprendía gratamente con el cambio de cereal solo que, y aquí entra mi particular opinión sobre la “comida de colores”, la emulsión azul que acompañaba al plato no le hacía ningún favor.
Para finalizar este acertado menú, un “Cordero segureño sous vide con couscous de migas a la cerveza” y “El postrecico” consistente en “Cremoso de pera ercolina de jumilla con toffe“. Difícil manejar la potencia de nuestro “borreguico” pero con la ternura deseada. Trago de Alhambra Reserva Roja, una maravilla que me presentaron. Este zumo de cebada y el postre, fueron la mejor combinación para este gilicrónico. Una maravilla, así fue.
Gracias a Ángela y su equipo por su menú, a Alhambra por el maridaje perfecto propuesto y a Irene en particular, y a Resu Rodríguez, comisaria gastronómica de Murcia Inspira, por la invitación. Queremos más eventos así. Necesarios son por estos lares en los que las puertas se cierran si no hay balance pecuniario positivo por medio. Gracias de nuevo y ¡enhorabuena!
@disparatedeJavi