La Táulla de Julio Velandrino se ha convertido en escasos meses en un must de Murcia y, volver cada cierto tiempo, un deber inexcusable. Si, además, ha elaborado un menú con fecha de caducidad, ni os cuento. Ayer tuvimos la oportunidad de disfrutar #delMediterráneoAlaTaúlla. Aquí, mi #gilicrónica.
Para ir abriendo boca y disfrutar de la cerveza tan deseada tras sufrir el clima tan agradablemente abrasador que sufrimos este miércoles, Julio nos servía unos langostinos del Mar Menor cocinados en agua de mar y espirulina. Como pipas, empezar y no parar. “Ostra, pepino melón, yogur, su escabeche y huevas de mújol” que hace que ya me meta en su bolsillo con mi molusco preferido. Eso sí, estoy seguro que este plato no está cerrado y seguirá evolucionando. El toque del escabeche redondeaba los demás toques sin borrar el más importante, el mar. El maridaje corrió a cargo de Inedit, cerveza Estrella Damm sobre la que solo me sale pronunciar una palabra: “elegancia”.
Señoras y señores, ¡cuádrense! Llegaba el “Gazpaviche de melva, tomate autóctono, verdolaga y albahaca salvajes“. Un espectáculo de sabores que van, vienen, vuelven, nuevos … todo un timbal de sensaciones que hace que este plato sea adorado por todo el que pasa por Espinardo. Ya lo echo de menos. Turno para otro platazo: “La Taúlla“, con espárragos verdes, blancos, crema de queso de cabra y calabaza totanera. Aquí, un nuevo #disparate. Por mucho que pruebe sus platos, siempre me impresiona cómo alcanza el punto perfecto de cocción de las verduras, utilice un kamado, un tandoor o un soplete para barcos. El pan de pimentón ya clásico se esfumó rebañando el fondo del plato. Delicia.
Para acompañarlo también nos puso unas “Flores de calabacín en fina tempura con mermelada de AOVE“. Estoy esperando mi envío a domicilio de dos cajas. “El huevo de gallina feliz“, con embutido murciano y crucíferas y caldo de jamón. Otro de los platos que Julio ha ido evolucionando, completando y perfeccionando hasta el de hoy día. Ya es por derecho un clásico de su carta. Nunca te cansas de comerlo. “Son 5 platos en uno”, me decía. Cierto es, sin duda, aunque estoy convencido que la próxima vez todavía le habrá dado otra vuelta. “Calamar cebolla tinta, liláceas y naranja asada con caldito de algas-miso“. El toque de la taronja fundamental para cuadrar el plato. Simplemente brutal. Bien para exprimirle el zumo, bien para comer bocaditos a cada cucharada del tentaculado perfectamente tierno. El maridaje de estos dos platos, Guiness.
Turno para el arroz. El de ayer fue “Caldero de ajo negro, galupe, sepia sucia y pimiento al kamado“. El galupe es el mújol joven del Mar Menor, tomen nota. Ese toque a regaliz que da el ajo negro genial, diferenciándose del golpe de su hermano blanco que a tantas personas se le termine de indigestar. Un plato que, al punto perfecto de sal, sigue manteniendo la tradición excelsa arrocera de la familia. Y para terminar los platos de este nuevo homenaje, “Secreto de cerdo autóctono, chimichurri, salsa criolla, yakitori y papa spunta”. ¡Menudo cierre! Una carne que llevaba a sus espaldas varias cocciones y que con su guarnición y salseo perpetuaba la sonrisa que se nos dibujó nada más sentarnos. El maridaje, esta vez, murcianico, de mano de la cerveza Cátedra (Fuente Álamo).
Los postres consistieron en su asentada “Tarta de queso y dulce de leche” y “Chocolate“, en varias texturas y temperaturas que hacen las delicias de los más galgos. En definitiva, merece y mucho la pena acercarse a La Taúlla los días que restan del mes de julio para probar el menú #delMediterráneoAlaTaúlla. Un menú equilibrado, estudiado y de una ejecución intachable que sería de necios dejar escapar. Vosotros sabréis, insensat@s. Muchas novedades se prevén con el inicio del curso escolar en septiembre. Estad atent@s. El camino meteórico que inició y continúa Julio Velandrino ha hecho que se convierta por méritos propios en una referencia obligatoria de la gastronomía de Murcia. Ya nadie lo discute. Y yo, lo disfruto … y mucho. SABOR, SABOR y más SABOR.
Gracias también al renovado servicio de sala que nos hizo sentir, una vez más, como en casa.
(Foto portada: @juliovelandrino)
@disparatedeJavi
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