Tras varios meses de fallidos intentos, este domingo, pude marcarme mis propias “crónicas carnívoras” en Goiko Grill, Murcia. Empachos con gusto no duelen. Aquí, mi breve #gilicrónica de la primera parte de un viaje que promete varias etapas.
Imagino que lo sabréis pero, si no, tened claro que en los pocos meses que lleva abierta esta franquicia/hamburguesería es imposible encontrar mesa presentándose por sorpresa. Mejor planificad vuestro ansia y entrad en la web para reservar vuestro pasaje al banquete calórico que os espera.
Viendo lo cargaditos que llegaban los platos a nuestro alrededor, fuimos prudentes y no pedimos entrantes. La próxima vez (que la habrá, seguro) acomodaré mis nalgas, papilas y capacidad estomacal para degustar unos “Nachos de Daniela“. Mi obsesión por las pequeñas tortitas de maíz no conoce límites y, viendo la fuente tamaño Olimpo que vi desfilar hasta la mesa de al lado, el límite soportable de ansia por probarlos se ha visto desbordado .
Un buen amigo me aconsejó pedir la “Yankee“, no la “Baby Yankee”, ojo. Una torre de pecado placentero compuesta por carne de vaca, costillar deshuesado en salsa barbacoa, queso, cebolla plancha (sin pochar, gracias a Tutatis) y lechuga batavia. La diferencia con su hermana pequeña es que, ésa, no lleva hamburguesa con lo que desconozco por qué la siguen llamando así pero eso habría que preguntárselo al de marketing. Su pareja de baile fue la brokenaüer (“BrokenEgger“) que, como su nombre indica, te rompe las pelotas al primer bocado. “Carne jugosa picada en la plancha, rellenada con crumble de txistorra, patatas paja, queso americano, cebolla caramelizada y coronada por un huevo frito”. Si leéis pausadamente ingrediente por ingrediente comprobaréis cómo vuestras glándulas salivales se aceleran y podréis haceros una leve idea de lo que es tener todo eso en la boca.
Me costó y aún me cuesta decantarme por una de las dos. Tal vez a la primera de ellas le pondría una pega: la carne del costillar no estaba todo lo jugosa que entiendo debería. Sin llegar a estar seca creo que podría haber estado más sabrosa sabiendo que van bien lacaditas en salsa barbacoa. Aún así estaba tremenda. Un pequeño “pero”. Pedimos las dos al punto y las dos llegaron cocinadas, no pasadas. El untuoso momento Big Kahuna me hizo perdonar el despiste.
El servicio atento y sospechosamente rápido (razón por la cual sospecho que no llegó la carne “al punto”. Si disponen de mesas de calor y no distinguen entre distintos puntos de cocción …). Además, y tras una pequeña equivocación con la hamburguesa de mis peques, tuvieron el detalle de servir una “Froizen Goiko” o lo que viene siendo una deconstrucción en texturas de las galletas Oreo. Los adultos, a pesar de estar más que serviditos, no nos resistimos a pedir la “Goiko Cokokie 2.0.” (3 capas de brownie, centro de lava de chocolate y capa de cookie con chips de bajo una bola de helado de vainilla). Si me ordenan ir a Mordor tras esto, habría llegado sin necesidad de lembas. Un auténtico #disparate azucarado.
La oferta de hamburguesas en Murcia está más que cubierta tras la llegada de Goiko Grill, sin duda. Tres son mis enclaves para disfrutar de ellas y dos de ellos están en Alfonso X. Recordad hacer vuestra reserva en la web. ¡Hala, a ponerse tibios!
@disparatedeJavi