Obrador San Francisco, Madrid

Obrador San Francisco o lo que viene siendo … PAN. No ese “corcho congelado” al que llevamos años acostumbrados por precio y comodidad. Un poco de inconsciencia, también. En otra de mis visitas exprés a Madrid pasé por allí y aquí os dejo la #gilicrónica de una masa madre más que placentera.

Con escasos 4 meses abierto, el Obrador San Francisco se ha convertido ya en una referencia del barrio. Las colas continuas en las tres horas que allí paso así lo certifican. Las caras de los clientes saliendo y metiendo las fosas nasales en sus bolsas lo rubrican aún más. Con una experiencia de años en una de las panaderías más boyantes de Madrid, Antonio Ramos se decidió a montar su propio negocio y a fe que no se ha equivocado.

La masa madre utilizada es 100% natural, nada de levaduras de sobre o pre fermentos, sino un cultivo vivo que “cuidamos y vigilamos a conciencia cada día”. Harinas e ingredientes ecológicos en panes o bollería. Pistolas, chapatas al peso, de trigo blanco, integral o con semillas, centeno integral, espelta semintegral o con semillas es la oferta diaria pero no finita. Sus rollos de canela vuelan y las cookies de vainilla y chocolate se me quedan en el tintero para el próximo viaje. De martes a sábado también podéis encontrar “panquemao” (bollo con aceite, huevo, azúcar y manteca ibérica).

Tienen claro que la tradición no deben dejarla atrás y recuperan las cocas, bollos o tortas, además de preparar “fuera de carta y por encargo” otras elaboraciones dulces y saladas. Vuela también el “Pan de choco” (cacao, chips de chocolate y sirope de ágave, solo sábados). Me habla también Antonio del “Pan Picajo” (con ajo asado y guindilla) y del “Pan con bagazo de cerveza” (aprovechando el de unos talleres de una tienda especializada) y los anoto a fuego en mi próxima comanda. Próximamente se lanzan a por el pan de molde. Non stop. Lo que allí se respira es OFICIO.

(Foto: Obrador San Francisco)

Mención especial al sistema de pago que tienen: una maquinita expendedora de papel timbrado y monedas que hace el servicio mucho más ágil. Y un consejo: no os cuesta nada coger el teléfono antes de ir si no os queréis quedar sin vuestro fermento favorito.

A la buchaca me eché uno de trigo blanco y otro de semillas y llevo dos días desayunando gloria y SABOR. Flagelándome estoy de no haberme traido más pero a fe que volveré pronto a por un nuevo cargamento. Panarras, el Obrador San Francisco es parada y fonda obligatoria cuando pateáis La Latina. Sin excusas.

@disparatedeJavi

“Porque no hay nada que deteste más que el hedor de la mentira.” (Y el pan de mierda)